weil y el lenguaje del amor
Para una fecunda reflexión: “El deseo de amar en un ser humano la belleza del mundo es, esencialmente, el deseo de la Encarnación. Por error, ese deseo cree ser otra cosa. Sólo la Encarnación puede satisfacerlo. Sin ninguna razón se les reprocha a los místicos el uso del lenguaje amoroso. Son ellos sus propietarios legítimos. Los demás sólo tienen derecho a tomarlo prestado.” (Simone Weil, Formas del amor implícito de Dios, 1942)
6 Comments:
Yo sigo reflexionando, pero de momento nada.
Es lo que tiene la Weil, a veces es maravillosa, sobre todo en su terreno (por ejemplo su ensayo "La Ilíada o el poema de la fuerza" es lo más bonito que he leído sobre la Ilíada), pero otras veces te deja muda.
PD: ¿Quién ha reprochado a los místicos el uso del lenguaje amoroso?
Para mí, más que de un reproche, se trata de una imputación: se dice, y es cierto, que los místicos emplean a menudo un lenguaje erótico. Weil sostiene que son ellos quienes lo utilizan con pleno derecho. Imagínate, por ejemplo, releer la poesía mística a la luz de esa idea (sólo en apariencia paradójica).
Hay un ensayo de D.H. Lawrence que no tengo a la mano, en el que aborda un comentario ácido de alguna personalidad de la época (20's o 30's), que se burlaba de que los sacerdotas dieran consejos y pronunciamientos sobre la vida sexual de sus feligreses. Decía, aquella personalidad, que quien debería dictar consejos era alguna prostituta retirada.
Lawrence destruye ese comentario, y tras un análisis linguístico y simbólico de la palabra "pontífice", concluye que el Papa debería ser el más indicado para darnos consejos especialmente sobre el amor carnal.
En bastante más explícito que Weil, pero en el fondo están hurgando en la misma tierra.
Interesante referencia, Alfredo. Si recuerdas en qué ensayo está, pásame el título.
No recerdo el nombre, pero vota atratar de buscarlo.. Un abrazo
Gracias, Alfredo.
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